Freaks o La Parada de los Monstruos, una joya del cine de terror

A la hora de hablar de películas de terror, pueden venirnos a la mente numerosos referentes, tanto geniales como lamentables, que de alguna u otra manera han definido o degradado el género, dependiendo de su calidad. Sin embargo, existen muchas cintas que aunque valen su peso en oro, han quedado relativamente olvidadas debido a su naturaleza polémica o poco convencional.
Una de ellas es “Freaks”, o “La parada de los monstruos”, como se le conoce en español.

Freaks o La Parada de los Monstruos


Este filme, que data del año 1932, fue realizado por el cineasta Tod Browning, y fue todo un horror en su época; tanto así que después de ser censurada en numerosos países, no pudo ver la luz hasta la década de los sesenta, en una exhibición especial durante el Festival de Cine de Venecia.

El argumento narraba la historia de Hans, un hombre enano que vivía en un circo en compañía de toda clase de fenómenos, como el hombre torso, las hermanas siamesas y la mujer barbuda. Hans se enamora de Cleopatra, una trapecista hermosa y cruel que solo lo utilizara para quedarse con su fortuna, hecho que le acarreara un castigo severo y traumático en el desenlace.
Cabe destacar que el elenco utilizado para el rodaje de Freaks, estaba conformado con personas que sufrían de deformidades y enfermedades auténticas, lo que resultó especialmente atroz para los espectadores de su tiempo.

Freaks o La Parada de los Monstruos de 1932

Aun así, hoy en día esta película es considerada una reliquia del cine de culto y fue muy apreciada por distintos cineastas como Luis Buñuel, quién encontró inspiración en la escena que muestra el banquete de bodas de Hans y Cleopatra para filmar “Viridiana”.